El profesor de nuestro centro repasa su trayectoria profesional y su labor investigadora fuera de las aulas
Don José Luis González nació en Pozoblanco, localidad en la que actualmente reside. Es licenciado en Filosofía y Letras, en la especialidad de Geografía e Historia. Lleva trabajando 36 años como docente, lo que hace que sea uno de los profesores más veteranos del IES
Antonio María Calero.
- ¿Cómo maneja la disciplina en clase?
Es una cuestión a la que hay que adaptarse. Yo soy muy intuitivo y me gusta ser también flexible. Hay unas normas que hay que cumplir, pero, en general, soy bastante flexible, quizá por la experiencia acumulada.
- ¿Siempre quiso dedicarse a la enseñanza?
Nunca lo pensé. Fue una cosa que surgió. Surgieron unas oposiciones después de muchos años sin convocarlas. Me presenté a ellas, las aprobé, me encantó la profesión y aquí estoy.
- ¿Ha trabajado en otros sitios además de en nuestro instituto?
Sí. Mi primer destino fue provisional. Después de aprobar las oposiciones, tienes un período, digamos, "de prácticas", y me mandaron de manera provisional a Peñarroya-Pueblonuevo. Luego me dieron la plaza en Hinojosa del Duque. Finalmente, cuando hicieron el IES Antonio María Calero, me dieron la plaza en él y llevo 32 años.
- ¿Cómo ha evolucionado el instituto desde sus primeros años hasta hoy?
Yo tuve que esperar a que hicieran el núcleo inicial. Era muy pequeñito. Solo comprendía el lugar donde ahora están los despachos de dirección, secretaría... También estaba el patio donde está hoy la cafetería y tampoco teníamos SUM. Luego ha habido tres reformas y tres ampliaciones que no se han acabado porque esta última no ha sido la que estaba pensada. El instituto se ha tenido que ir adaptando a las necesidades y a las exigencias que había. Al principio, el centro solo estaba dedicado a estudios de formación profesional y, posteriormente, evolucionó e incorporó ESO y Bachillerato.
- Además de dedicarse a la enseñanza, usted ha escrito algunos libros. ¿Nos podría hablar un poco de cada uno de ellos?
No muchos, porque necesitan mucho esfuerzo. Son libros de investigación, ensayos... y, normalmente, llevan tanto esfuerzo que a veces no tienes tiempo para ellos. Pero sí, he escrito algunos y he escrito bastantes colaboraciones en revistas, libros,, asociaciones, etc. Libros solo he escrito dos. Lo que más me gusta de escribir libros es el momento en el que los estoy haciendo y el tema del que estoy hablando. Los temas de mis libros son muy variados.
- ¿Por qué le emociona la historia?
Porque para mí la historia es una actividad emocionante. Porque vosotras pensad que la situación actual es el resultado de una acumulación de experiencias que se han ido teniendo de épocas anteriores y esto lo vamos viendo en el estudio de la Historia.
- ¿Nos puede hablar un poco sobre el descubrimiento que hizo sobre la historia de Dos Torres?
Una persona que se acerca a la investigación va a descubrir cosas, está claro. Muchas veces estaban ahí desde siempre, pero se habían perdido sus rastros. Yo tengo acceso a todos los archivos del Valle de Los Pedroches y tengo bastante conocimiento sobre la historia de Dos Torres. Pero, a la raíz de las jornadas de Historia que se han celebrado, me llamaron del ayuntamiento de Dos Torres y me pidieron que investigara sobre la fecha de unificación de Torrefranca y Torremilano. Lo descubrí y pude saber la fecha exacta. Eran temas muy inéditos porque todos los documentos de Dos Torres se habían perdido en la guerra y yo pude tener la experiencia de profundizar en ellos. A partir de ahí, pude tener conocimiento de cuándo, cómo y quiénes y pude comprobar que la auténtica fecha de unificación de Dos Torres
no coincidía con la que se venía diciendo. Esta participación me ha permitido descubrir otros acontecimientos igual de importantes, o incluso más, como es, por ejemplo, quién construyó la torre de la parroquia y también por quiénes, cómo y cuándo se construyó la ermita de Loreto; o pude comprobar cuándo se destruyó la muralla que separaba a Torrefranca y Torremilano.
- Hemos oído que, además de ser profesor y escribir libros, ha dado algunas charlas en la asociación "Piedra y Cal" a la que usted pertenece. ¿Nos puede hablar sobre la conferencia que dio sobre la historia de los apellidos pozoalbenses?
La gente quiere saber normalmente de dónde viene y buscar sus antecedentes. Yo tengo el conocimiento de todos los archivos de las personas que vivían en Pozoblanco; de hecho, yo digo que conozco mejor a los muertos que a los vivos. Di esa conferencia y para mi sorpresa pude ver que fue una conferencia muy llamativa y seguida por muchas personas e incluso fue emitida por el Canal54 y lleva 1500 o 1700 visitas ya. Por tanto, ha sido una conferencia que ha gustado mucho e incluso me han pedido que escribiera un libro sobre ello.
- ¿Le gusta su trabajo como investigador? ¿Qué nos puede contar sobre él?
Sí claro, cada vez más. Como ya os dije, me acerqué a la investigación por una cuestión genealógica y, poco a poco, ha ido ocupando la mayoría de mi tiempo libre y también de mis objetivos como persona. Es un trabajo muy satisfactorio, a la vez que decepcionante ya que no tienes medios para hacerlo público.
- ¿Le ha ocurrido alguna anécdota graciosa durante su carrera profesional?
Todos los días a todas horas. Pero algunas que podrían destacar son las siguientes: un día, al estar trabajando en Hinojosa, recibí una llamada de teléfono a dirección, a los dos años de sacarme la carrera. Mi interlocutor me preguntó si yo era José Luis González. Me dijo que llamaba para confirmar mi jubilación y yo, al llevar solo dos años trabajando, pensaba que se trataba de una broma. Pero me di cuenta de que no se trataba de ello y, al decirle a la persona que llamaba que si se trataba de una broma, este se enfadó mucho, pero al final todo de solucionó. Otra, por ejemplo, fue que cuando fui a investigar a Dos Torres, me tuve que quedar en el ayuntamiento, en obras y cerrado, y pillé una gripe enorme.
Natalia Encinas y Alba López.
La Ruta de la Tapa, en la que este año han participado 23 establecimientos de la localidad que han presentado un total de 46 tapas, es una actividad que, tras celebrarse durante cinco años consecutivos, ya está asentada en el municipio y que se ha convertido en un destacado acontecimiento que, además de ayudar al comercio local y a dar a conocer la gastronomía de Hinojosa, puede considerarse un hecho de gran interés en todo el Valle de los Pedroches hasta el punto de que, como se esperaba que la localidad recibiese muchas visitas, se contrató un servicio de tren turístico que fue haciendo paradas por los establecimientos, y se fletaron autobuses con paradas en Pozoblanco, Añora, Dor Torres, Alcaracejos, Villanueva del Duque, Villaralto y El Viso.
Alba López
4. Los trabajos se presentarán por triplicado y sin identificación alguna. En sobre aparte, cerrado, constará el nombre, apellidos, domicilio, teléfono y DNI del autor, indicando en el exterior el título del trabajo. Los trabajos serán entregados en los salones de los AA.AA. de Don Bosco hasta las 22 horas del día 11 de enero de 2016.
