DON ANTONIO TAMAJÓN FINALIZA HOY SU ETAPA COMO PROFESOR EN ACTIVO

Tras 30 años en nuestro centro, don Antonio Tamajón cierra definitivamente la puerta de su aula. 

Tras dedicarse durante 32 años a la enseñanza, de los cuales 30 de ellos han transcurrido en el IES "Antonio Mª Calero", el profesor de Física y Química de nuestro centro, don Antonio Tamajón, ha puesto fin esta mañana a su dilatada vida laboral para pasar a disfrutar de una más que merecida jubilación que le permitirá dedicar más tiempo a su familia, amigos y aficiones.

Natural de Baena, aunque afincado en el Valle de
los Pedroches desde hace ya tres décadas, desde muy pronto tuvo claro que quería ser profesor, meta que logró alcanzar pese a que, como él mismo recuerda, "cuando terminé la carrera, tuvimos una crisis económica como la de hoy, e incluso peor. Nos presentamos a las oposiciones libres más de trescientos profesores y solo había seis plazas".

Don Antonio comenzó su labor como docente en el IES Politécnico de Linares, en el que trabajó durante un curso escolar, y, tras ejercer otro año en el IES "Lope de Vega" de Fuenteovejuna, llegó a nuestro centro para poder estar junto a su esposa, gracias a una permuta con el profesor que tenía su plaza definitiva en él, con la idea, como él mismo nos dijo, de "quedarse para mucho tiempo". De hecho, hace dos años tuvo la oportunidad de cambiar de destino y no lo hizo ya que, según cuenta, "preferí terminar mi carrera aquí, en Pozoblanco" porque "estoy contento en este centro".

Y lo ha hecho. Al final han sido treinta años de docencia en nuestro instituto, un largo período del que le resulta muy difícil hacer un breve balance: "son treinta años de mi vida que han pasado intensamente... He tenido la suerte de ser profesor de una asignatura que me apasiona y de unos magníficos alumnos y, por supuesto, he trabajado junto a grandes profesionales que aman, como yo, su profesión de docentes".

Durante las tres décadas en las que ha trabajado en el "Calero" siempre ha tenido una serie de objetivos claros: "preparar mi clase cada día y ayudar a mis alumnos en todo lo que pueda", además de procurar "crear un clima que propicie el aprendizaje", y de intentar "que mi alumnado llegue a amar la ciencia" y adquiera aquellos valores que le fueron inculcados en la SAFA, el colegio gestionado por los jesuitas en el que realizó sus estudios de Enseñanza Secundaria. Y no solo lo ha conseguido, sino que también se ha convertido, gracias a su trabajo, a su afán por mejorar y a su incansable dedicación a sus clases, sus alumnos/as y su centro, en uno de los pilares básicos de nuestro instituto y en uno de los referentes de muchos/as de los/as que hemos tenido el privilegio de compartir una parte de nuestra vida laboral con él.

Don Antonio con un grupo de alumnos/as

Don Antonio es esa persona que ha demostrado hasta su último minuto de clase que su pasión es la enseñanza, tanto que siempre ha buscado dar a sus clases un carácter práctico mediante experimentos que le han permitido, además de transmitir conocimientos a sus alumnos/as, motivarlos y hacer que disfruten con el mundo apasionante de la ciencia como él lo hace; esa persona que nunca ha dejado de seguir formándose como docente; esa persona que se ha desvivido por ofrecer la mejor imagen de nuestro centro y de quienes trabajamos en él (fue él quien creó muchos de los blogs con que cuentan nuestros departamentos, quien participó en el montaje de los talleres de fotografía y de vídeo, quien ha abierto nuestra actual página de Facebook, quien con su cámara fotográfica ha inmortalizado muchos de los acontecimientos acaecidos en este centro y de algunos de los actos más emotivos que hemos vivido en él...); esa persona a la que muchos/as de sus compañeros/as hemos recurrido cuando hemos necesitado su colaboración, una colaboración que en todo momento nos ha regalado de manera rápida, eficaz y desinteresada.

Don Antonio realizando un experimento ante sus alumnos/as

Antonio, así que, llegados a este punto, solo me queda reiterarte mi gratitud, hoy públicamente, por la ayuda que me has brindado siempre, pero especialmente durante el pasado curso, y desearte mucha suerte en la nueva vida que empiezas.


Rosa Galeano Cuenca.