Doña Sonia Zamora, profesora de Física y Química, impartió clase en nuestro centro hace ya tres cursos hasta que tuvo que desplazarse debido a que no tenía en él su plaza definitiva. Hoy, en El calerito digital, la entrevistamos.
- ¿En qué momento descubrió usted su vocación por la Física y la Química? ¿Y por su profesión?
Cuando estaba en 3º BUP y COU porque comprobé lo importante que era la Ciencia en la vida cotidiana y en los avances de Medicina, investigación y desarrollo científico. Descubrí que me gustaba ser profesora cuando empecé a dar clases particulares porque comprobé lo que me gustaba explicar y enseñar. Además, no me importaba explicarlo muchas veces. Después, he aprendido que en esta profesión hay que tener mucha paciencia.
Cuando estaba en 3º BUP y COU porque comprobé lo importante que era la Ciencia en la vida cotidiana y en los avances de Medicina, investigación y desarrollo científico. Descubrí que me gustaba ser profesora cuando empecé a dar clases particulares porque comprobé lo que me gustaba explicar y enseñar. Además, no me importaba explicarlo muchas veces. Después, he aprendido que en esta profesión hay que tener mucha paciencia.
- ¿Cuántos años lleva usted en su profesión? ¿Está satisfecha con la labor realizada a lo largo de ellos?
Llevo 10 años, pero considero que me queda mucho por aprender. Lo que ocurre es que los profesores y profesoras no estamos lo satisfechos que quisiésemos por tantos cambios como se están produciendo en la enseñanza debido a la política.
- ¿Puede enumerar los centros educativos en los que ha impartido clase y las provincias por las que ha pasado como profesora?
He estado en varios: el IES Inmaculada Concepción (Madrid), el IES La Salle (Griñón-Madrid), el IES Villanueva De Arzobispo (Vva. de Arzobispo- Jaén), el IES Gandhi (Orcera- Jaén), el IES La Jara (Villanueva de Córdoba- Córdoba), el IES Maimónides (Córdoba), el IES Ángel de Saavedra (Córdoba) y ahora estoy en el Ricardo Delgado Vizcaíno (Pozoblanco).
- ¿Supone una dificultad para usted el hecho de tener que trasladarse de centro, conocer a gente nueva, adaptarse a otra localidad...?
Dificultad no, mucha pereza y, sobre todo, desde que tengo a mi hijo porque no solo viajo yo, sino también él. Lo que más me duele con estos traslados son los cambios de
colegio de mi hijo porque eso está haciendo que tenga llamadas de atención al
llegar a los colegios nuevos. Sin embargo, al final, te acostumbras a esto,
aunque incluso puedes llegar a tener problemas en la familia porque dejas a toda
la familia en Puertollano, lugar de donde soy yo.
Inés Luna López Fernández.
-De todos los institutos por los
que ha pasado hasta ahora, ¿cuál ha sido el que más le ha gustado? ¿Por qué?
El IES Antonio Mª Calero. Al estar tres cursos, me dio tiempo a conocer a
los alumnos/as y profesores/as mejor. Sobre todo, lo que da un bienestar en el centro
es permanecer muchos años en él porque así cada año estás más integrada, por lo
menos en mi caso.
-¿En cuál de ellos ha hecho
usted más amigos? ¿Sigue conservándolos?
La verdad que en todos suelo
hacer amigos, pero de donde más conservo es del Antonio Mª Calero porque da la casualidad de que con algunos
compañeros he vuelto a coincidir.
Al principio sueles tener
contacto, pero, por desgracia, al tiempo lo vas perdiendo porque son muchos
cambios. Desde que empecé tengo cinco amigos con los que sigo manteniendo
contacto.
-¿Qué balance haría usted de su
estancia en el IES Antonio María Calero?
El balance ha sido muy bueno,
porque no solo mantengo contacto con profesores/as, sino también con algunos alumnos/as a los que
les di clase en 2º de Bachillerato, ya que fui tutora de ellos.
- De todos los alumnos/as a los
que ha impartido clase en nuestro centro, ¿hay alguno o alguna a los que
recuerde especialmente? ¿Por qué?
Sobre todo, a los alumnos de mi
tutoría de 3º ESO y de 2º de Bachillerato. Esto es debido que cojo más
confianza con ellos y, al tener contacto con sus padres, los veo con más cercanía.
- ¿Podría explicarnos cuál es su
tipo de alumno/a ideal?
El alumno/a no solo que sepa
mucho, sino que sea compañero de los demás, que colabore en el centro, que te
pregunte cuando te vea triste…
- A día de hoy, ¿cambiaría su
trabajo? ¿Por qué?
No lo cambiaría porque tengo
vocación. Lo que ocurre es que muchas veces, sobre todo al principio de curso,
estoy muy desanimada, por los cambios de sitios, dejar a la familia… Siempre
diré que somos como los feriantes. Pero, bueno, ahora ya estoy más contenta
porque ya me han dado el destino definitivo aquí, en Pozoblanco, lo que
significa que el próximo destino será Puertollano.
- ¿Qué es lo que más le gusta de
su trabajo? ¿Y lo que menos?
Lo que más me gusta es enseñar y
que los alumnos/as aprendan; verles muy atentos cuando les cuentas algo
que ocurre en la vida real relacionado con lo que están estudiando. Lo que menos
son los traslados y tantos cambios.
- ¿Ha tenido alguna mala
experiencia en el aula?
Sí, en una clase de PCPI.
Empezábamos a dar clase cuando se levantaron dos alumnos y se empezaron a
pelear, pero con las manos. Corriendo mandé a un compañero a que avisará a la
directiva y los expulsaron.
- De no haberse dedicado a la
enseñanza, ¿en qué le hubiera gustado trabajar?
En un laboratorio, investigando.
En realidad, cuando empecé a estudiar, las prácticas en el laboratorio eran lo
que más me gustaba.
- La Física es una de las
materias que los alumnos/as consideran difícil. ¿Qué materia le parecía más
complicada o le gustaba menos cuando estudiaba en su instituto? ¿Por qué?
La materia que menos me gustaba
era Historia porque no me gustaba estudiar de memoria. Me gustaban mucho Matemáticas
y Física y Química porque eran más de razonar y la verdad es que se me daba mejor
el razonamiento.
Inés Luna López Fernández.
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