DOÑA ISI TORRALBO: ¨La música es una manera de evadirme de la cotidianidad¨

 Doña Isi nació en Villanueva de Córdoba, el 28 de octubre de 1978. Fue parte de la primera generación que cursó la ESO. Posteriormente, realizó Bachillerato. Finalmente, en Córdoba, combinó la carrera de Magisterio y los Estudios Superiores de Música en saxofón. Llegó a nuestro Centro en el curso 2003/2004.        

-¿Qué le hace sentir la música y por qué la eligió? 
La música es una manera de evadirme de la cotidianidad y de expresarme. Yo empecé a estudiar música obligada por mi padre y, una vez que empiezas, el gusanillo te pica hasta que lo haces tu vida. De hecho, estoy rodeada de músicos entre los amigos, la familia, etc.

-¿Qué actividades relacionadas con la música ejerce fuera del instituto?
Los que somos músicos lo que queremos es tocar. Dar clases en el instituto es nuestro sustento, nuestra manera de ganarnos la vida. Pertenezco a la Banda de Música de Vva. de Córdoba, desde hace 25 años; tocó el saxofón alto y ocupo la subdirección musical y llevo dirigiendo la Coral ¨San Miguel Arcángel¨ más de 10 años.

- Nos podría hablar de sus gustos musicales.
Me gusta escuchar de todo. Para opinar, tienes que conocerlo. Me gusta la música Pop (actual) y por mi trabajo tengo que hacer un recorrido por la historia de la música. Johann Sebastian Bach me parece un músico brillante para su época; Beethoven, un genio; Pedro Iturralde, un saxofonista muy completo. También me apasiona el mundo de las bandas sonoras de películas y la polifonía coral.

 - ¿Cuál es su opinión respecto al panorama musical actual?
Es lo que hay, lo que a la gente le gusta...  No es música buena, pero para un rato o un verano está bien. Tienen un boom, pero se acaba rápido. Como ya os he dicho, yo escucho todos los tipos de música.

-¿Cuál es el sitio más peculiar en el que ha tocado? 
Recuerdo un año en el que estuvimos la gente del coro de vacaciones (nos vamos todos los veranos). En el paseo marítimo nos pusimos a cantar polifonía y, cuando nos dimos cuenta, estábamos rodeados de gente.
Te das cuenta de que hacer música ¨a capella¨ es tan enriquecedor y llega a tocar la fibra sensible del oyente. Además, la gente entendió que no toda la polifonía es religiosa y que en este tipo de agrupaciones también tiene cabida la gente joven.

-¿Tiene composiciones propias? ¿Cuáles han sido sus influencias?
No. Me limito a tocar y cantar lo que ya está escrito. Lo saben hacer mejor que yo evidentemente.  

-Si no hubiera tocado el saxofón, ¿qué otro instrumento le hubiera gustado tocar? ¿Por qué?

El piano. Es un instrumento muy versátil. Una sola persona hace melodía y acompañamiento.

-¿Le hubiera gustado impartir clase en el conservatorio en lugar de hacerlo en un instituto?  

Sí, la verdad es que si. El alumnado es diferente. El chico que va al conservatorio es porque quiere y le gusta. Aunque bien es cierto que en el instituto puedo llegar a más alumnos, incluso hacer que a un alumno le guste e interese la música.   

-¿Ha impartido clase en algún otro centro?
Terminé la carrera en 1999, estuve un curso opositando en Toledo, luego aprobé y me trasladé a Belalcázar de funcionaria en prácticas durante un año. Obtuve mi plaza definitiva en Sevilla donde trabajé durante dos cursos, concursé  y me dieron plaza aquí. No me puedo ir a Villanueva de momento, pero estoy muy contenta en este centro.

-De los cuatro centros educativos en los que ha trabajado, ¿en cuál se ha sentido más cómoda? ¿Por qué?

He tenido la suerte de estar muy a gusto en todos los centros por los que he pasado. En Mora de Toledo, me estrené como profesora y trabajé con mucha ilusión. En Belalcázar, disfruté de mi docencia sabiendo y con la tranquilidad que te da aprobar una oposición. En Lora del Río, conocí a unos compañeros extraordinarios que me acogieron y me dieron mucho cariño. A Pozoblanco llegué con la alegría de volver a mi casa, a mi pueblo y poder disfrutar de la conciliación familiar que tanto deseamos los profesores. 

Javier Díaz (2º BB)
Carmen Valverde (2º BB)