La comida de fin de curso realizada por el profesorado el 29 de junio de 2022 coincidió con la despedida por jubilación de dos de los profesores con más antigüedad en el centro, don Rafael García Herruzo y don Javier Cangas, así como de nuestro conserje más veterano, don José Manuel Mansilla.
Tras la comida, en primer, lugar, se rindió homenaje a don José Manuel Mansilla quien, tras cuarenta años trabajando como conserje en nuestro instituto, se había jubilado en octubre de 2021. Fue doña Lola Márquez quien le dedicó unas emotivas palabras, después de las cuales don José Manuel tomó la palabra para hacer referencia a los años trabajados en el "Calero".
A continuación, le tocó el turno a don Javier Cangas quien, tras treinta y cuatro años dedicado a la enseñanza, se había jubilado en agosto de ese mismo año. En el transcurso del acto de jubilación, durante el cual don Javier contó con la compañía de su mujer (Mari Carmen) y una de sus hijas (Esther), su compañera del departamento de Francés, doña Isabel Fernández, pronunció unas bonitas y cariñosas palabras sobre el homenajeado, tras las cuales fue el propio don Javier quien habló a todos/as sus compañeros/as a los/as que agradeció el trato recibido durante los veinticinco años que había trabajado en nuestro instituto.
Tras ambos discursos, doña Isabel le hizo un regalo a don Javier.
Para finalizar, don Miguel Ángel Torrico y don Francisco Onieva pronunciaron un discurso de despedida en honor a don Rafael García Herruzo quien, después de treinta y dos años en el "Calero" y casi treinta y cuatro de docencia, abandonaba el centro. Acto seguido, un emocionado don Rafael tomó el micro para realizar una intervención en la que hizo referencia a su largo recorrido profesional. Tras esta, doña Rosa Galeano le entregó unos obsequios de parte de todo el departamento de Lengua.
A los tres homenajeados el director del centro, don Carlos Sánchez, y la jefa de estudios adjunta, doña Carmen Sánchez, les hicieron entrega de un reloj, una placa en reconocimiento a su labor docente y un ramo de flores. Además, don Javier Cangas fue obsequiado con la encina de plata que se otorga tradicionalmente en el instituto a quienes llevan trabajando en él veinticinco años.
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