La novela tiene como punto de partida un "terrible" escándalo producido en una pequeña comunidad puritana de Nueva Inglaterra: una mujer casada (Hester Prynne) ha tenido un hijo con un hombre que no es su marido. Cuando se descubre este hecho, ella se niega a revelar el nombre de su amante y es condenada por todos sus vecinos a llevar una letra en el pecho (la "a" de adúltera). Dicha letra irá con el color de la piedra escarlata (un tono en carmín, algo intenso y de aspecto muy oscuro), de ahí el título de la novela.Hester es obligada a permanecer durante tres horas sobre una gran columna de piedra, para ser humillada por la población. A pesar de toda esta presión, la protagonista sigue negando el nombre de su amante.
El esposo desaparecido de Hester Prynne aparece justo en el momento en el que su mujer es condenada por adulterio. Sonrojado, se hace pasar por médico para descubrir al amante de su esposa.
Posteriormente, ayuda a su mujer encarcelada y, juntos, consiguen que Hester tenga una nueva identidad. De este modo, ella obtiene su libertad y se instala en las afueras de la ciudad.
Conforme pasa el tiempo, su hija Pearl crece y se convierte en una adolescente caprichosa y rebelde, y el párroco de la iglesia considera oportuno que esta chica sea alejada de su madre. Hester pide ayuda al reverendo Dimmesdale y se apoya en él para recuperar a su hija. Entonces, su esposo, bajo la identidad de médico, trata a Dimmesdale, ya que este se había puesto enfermo. Poco a poco, va descubriendo que el reverendo Dimmesdale es el amante de su mujer.
Al cabo del tiempo, el reverendo es obligado a subir sobre la gran columna de piedra para revelar su infidelidad. Este muere sobre los brazos de Hester. Con el paso de los años, Hester regresa a su humilde hogar, donde sigue llevando la letra de adúltera. Al poco tiempo, fallece y es enterrada junto a la tumba de Dimmesdale.
En definitiva, La letra escarlata es una novela muy conmovedora, llena de sufrimiento, ingratitud y fortaleza. La forma en la que es expresado el calvario de la protagonista consigue que el propio lector lo sufra.
Nathaniel usa un vocabulario muy rico y unas descripciones espléndidas acerca de los personajes y el ambiente de la ciudad. Es un clásico de la literatura.
María Valero Peralbo (2º BA)
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