lunes, 11 de enero de 2021

¿CÓMO SE ESTÁ AFRONTANDO LA COVID-19 EN NUESTRO CENTRO?

En este reportaje vamos a conocer más a fondo las medidas tomadas por nuestro instituto, el AMPA y el ayuntamiento para afrontar esta situación atípica que estamos viviendo a causa de la COVID-19; además, hemos realizado una entrevista a doña Lola Pena, vicedirectora y coordinadora COVID, y a don Federico Piña, jefe de estudios del instituto.

A través de este reportaje, en el que incluimos toda la información sobre el funcionamiento del centro durante la pandemia y sobre cómo hemos afrontado la "nueva normalidad", vamos a conocer cómo, gracias a la ayuda de todos y todas, se han podido adoptar unas medidas que benefician la salud tanto del equipo docente como del alumnado.



Medidas tomadas por nuestro centro

Nuestro centro, el IES Antonio María Calero, a través de su directiva, a principio de curso adoptó una serie de medidas que se vieron reforzadas gracias al ayuntamiento y a las ayudas de la Junta de Andalucía.

Como punto de partida, estableció un protocolo que constaba de 79 páginas, en el que se recogían tanto las pautas que debían seguir el alumnado y el profesorado, como una serie de actuaciones aplicables en caso de que se diera algún positivo en el instituto. 

Se diseñó un plan para regular la entrada y salida del centro: se fijaron dos accesos, uno situado en la puerta de entrada principal y otro en la puerta trasera, ubicada en calle María Zambrano. A través de esta medida, se está logrando que la entrada y salida del centro sea fluida y se están evitando las aglomeraciones en dichos accesos.

Otro plan que se adoptó fue la creación de varias rutas de colores por las que debe circular el alumnado evitando así que se mezclen los alumnos y alumnas de distintos niveles. A través de esta medida, se ha conseguido que no se produzca una acumulación de alumnos/as pertenecientes a diferentes grupos. En las siguientes imágenes vemos un plano de algunas de las cincos rutas señaladas por colores, en el que aparece el itinerario a seguir por cada grupo según el color que le corresponde.














También se dividieron en varias partes las áreas comunes: los baños y el patio de recreo. Se repartieron los baños del centro entre los grupos de clase para que no haya confluencia de alumnado perteneciente a distintos grupos; además, a la hora del recreo, se dividió el patio en varias áreas y a cada nivel le correspondió una zona concreta. También se habilitaron más clases para que los alumnos y alumnas dispusieran de más estancias en las que dar las clases.


Ahora vamos a hablar de unas de las medidas más importantes y fundamentales, según la Junta de Andalucía, que evidentemente también se han aplicado en nuestro instituto: la separación de 1,5 metros entre cada alumno/a para así garantizar la seguridad de todos/as ellos/as, al igual que la ventilación permanente en clase, donde tanto ventanas como puertas permanecen siempre abiertas para que de esta forma se produzca una mayor fluidez de aire. 

También hemos de hacer referencia a la distribución de gel hidroalcohólico en todas las aulas y en las áreas comunes del centro  para de esta forma asegurar la seguridad de los alumnos y alumnas, así como la de los equipos docentes; además, en cada clase se han colocado también desinfectantes para que, cuando el alumnado y profesorado cambie de aula pueda desinfectar el lugar que haya ocupado en dicha clase, de manera que, cuando un/a alumno/a o profesor/a distinto/a deba situarse en ese lugar, esté totalmente desinfectado.

Por último, cabe destacar la labor realizada por el equipo de limpiadoras que cada día limpian y desinfectan las instalaciones de nuestro centro así como se aseguran de que todos los baños sean desinfectados durante la jornada diaria. 

Junto a todas estas medidas, también se estableció un sistema de actuación que se está aplicando cuando algún alumno/a o profesor/a manifiesta tener síntomas compatibles con la COVID-19 o da positivo una vez realizada la PCR. De este nos hablaron doña Lola Pena y don Federico Piña en una entrevista que les realizamos y que reproducimos más adelante en este reportaje.


Medidas tomadas desde el Ayuntamiento y AMPA

A parte de las medidas adoptadas por nuestro centro, el Ayuntamiento de Pozoblanco, a través de la concejala de Educación y Salud, Anastasia Calero, y Protección Civil hicieron entrega a los centros escolares de Educación Secundaria y Bachillerato tanto de material sanitario para proteger frente a la COVID19, que incluye mascarillas y desinfectante de superficie, como de material de la campaña de prevención y concienciación frente al virus dirigida al alumnado.

 

También pusieron a disposición de los centros educativos los espacios públicos de las casetas municipales para que aquellos centros que lo necesitasen pudieran realizar las tutorías con los padres y madres o aquellas reuniones que implicaran una gran afluencia de personas. En este caso, nuestro centro, el IES Antonio María Calero, decidió celebrar allí el claustro inicial y la reunión de la directiva con los padres y madres de cada uno de los niveles que se imparten en él. Estos espacios se desinfectaron al finalizar cada una de las reuniones y antes de que comenzara la siguiente.




Además, de cara al inicio del nuevo curso escolar, antes de que comenzaran las clases, se realizaron labores de limpieza y desinfección frente a la COVID-19 en los centros educativos de Pozoblanco.


En las siguientes imágenes aparecen carteles de las numerosas campañas realizadas por el ayuntamiento y por la Junta de Andalucía, como medida de prevención de la COVID-19, en los que se explica cómo se debe actuar si se ha dado positivo en el test o se ha estado en contacto con un positivo.

        

El ayuntamiento también ha puesto a disposición de todos los centros de nuestro pueblo, incluido el nuestro, purificadores  de aire y medidores de CO2. En concreto, el alcalde de Pozoblanco, Santiago Cabello, y la concejala de Educación y Salud, Anastasia Calero, nos hicieron entrega de 24 purificadores y un medidor de CO2, que se han distribuido por las diferentes clases. 


Al igual que el ayuntamiento, la AMPA "La Encina" de nuestro centro donó 1.000 € al instituto para la adquisición de material de prevención contra la COVID-19, y lo dotó de gel hidroalcohólico, papeleras, dispensadores de gel, bayetas, rollos de papel, etc.



Entrevista a doña Lola y don Federico

Para profundizar y conocer más a fondo el sistema y las medidas que se han planteado contra la COVID-19 en nuestro centro, les hicimos una entrevista a doña Lola, vicedirectora y coordinadora COVID, y a don Federico, jefe de estudios.

Doña Lola, ¿puede explicarnos con más detalle qué medidas ha impuesto el Antonio María Calero para garantizar la seguridad de alumnos/as y profesores/as? 

Hemos hecho seis rutas para entrar al instituto, por las dos puertas que hay: la principal y la trasera. De este modo, más o menos la mitad del alumnado entra por una y sale por una, y la otra mitad utiliza la otra. A tres de las rutas le ha correspondido una puerta y a las otras tres la otra. Intentamos siempre que la mitad de los alumnos utilicen cada puerta y además hemos hecho un horario diferente para entrada y salida (8:30-8:45, 14:45-14:55) para evitar en todo momento que haya una masificación. También utilizamos todas las puertas que hay en el instituto para entrar al edificio, tanto al antiguo como al nuevo. A cada grupo se le ha puesto una puerta para que entren siempre y salgan por ahí, se han puesto también zonas de recreo, aseos diferentes por grupos. Luego está la higiene de manos: en todas las clases intentamos que haya tanto un bote de gel hidroalcohólico como otro de desinfectante; se intenta mantener la distancia de seguridad entre pupitres cuando se puede. Yo sé que hay clases en las que estáis más estrechos de lo que se debería, pero es que no tenemos otra cosa.    

Doña Lola, ¿si un alumno no asiste a clase porque hay personas vulnerables en su familia, puede realizar sus estudios de forma telemática? 

Eso es una cosa que está teniendo mucha polémica porque la educación es obligatoria hasta los 16 años. En Andalucía no hay legalmente ninguna forma de llevar a cabo lo que preguntáis. En una de las instrucciones que mandaron sobre la COVID, se recoge que, en casos muy excepcionales en los que se aporten informes médicos, o sea algo muy muy específico, muy demostrado, esos alumnos podrían recibir clases en casa a través del Instituto Andaluz de Educación a Distancia (que existe para algunos alumnos que no pueden ir a clase), pero ya os digo eso es súper complicado y solo se da en casos muy específicos.

Doña Lola, si un alumno o alumna presenta síntomas compatibles con la COVID-19, ¿qué medidas tiene que tomar el centro? 

Nosotros tenemos tres salas de aislamiento por si se diera el caso de que tres personas presentaran síntomas a la vez. En principio, la que está destinada para este supuesto es la caseta que hay a la entrada del instituto. Las otras dos, por si se presentan mas casos simultáneamente, son el antiguo taller de vídeo, en la planta baja, y otra sala en la primera planta. 

Cuando un alumno presenta síntomas, le ponemos el termómetro digital que tenemos, lo llevamos a esa sala y el profesor de guardia llama a la familia para que vengan a por ellos lo antes posible. Por eso decimos que este año las familias tienen que tener un número de teléfono siempre disponible, no pueden decir no puedo ir o hasta las dos no salgo de trabajar y no puedo ir, porque es que entonces va a estar metido en esa sala hasta que vengan a por él.

Si se diera el caso de que alguien está muy muy malo, directamente llamamos a emergencias o lo llevamos incluso a urgencias si podemos llevarlo, pero no se ha dado el caso todavía. 



Doña Lola, ¿cómo es la relación de las familias con el centro? 

Estamos utilizando este año el iPasen porque, como no podemos tener contacto presencial o, al menos,  hay que evitarlo, lo mantenemos, especialmente, a través de iPasen, pero también del teléfono, correo electrónico…

De hecho, jefatura de estudios ha hecho una encuesta hace poco para valorar la comunicación con las familias. 

Don Federico, ¿qué ocurre cuando el profesor da clase en varios grupos y resulta ser positivo en COVID-19? 

Todo eso está dentro del protocolo de actuación que nosotros tenemos y, ante todo ello, es el centro de salud el que decide y nos lo comunica a través de coordinación que tenemos con él.  

Evidentemente, si el profesor ha sido positivo, tendrá que estar aislado. En un principio, cuando el profesor da positivo, son los rastreadores los que le hacen el rastreo y y averiguan con qué alumnado o personas en general ha tenido contacto. Si dicho contacto entre el positivo y otra persona se ha producido sin mascarilla durante más de 15 minutos y a menos de metro y medio de distancia, a esa otra persona se la considera persona de riesgo por contacto estrecho y también se la cita para hacerle la prueba.

Es el centro de salud el que decide, tiene que hacer el estudio de la relación o el vínculo que ha mantenido el profesor con el alumnado y entonces decide quiénes son contactos estrechos y quiénes no  lo son, y se les hace la PCR diagnóstica a esos contactos estrechos.

Don Federico, ¿quién decide el aislamiento de un grupo o el cierre de un centro? 

El centro de salud. El centro de salud es el que tiene las competencias en esas medidas. Tenemos constancia de que con dos alumnos se confina el grupo; con uno no, con dos sí. Con un caso, el rastreador  habla con él y le pregunta quiénes han sido sus contactos, sin mascarilla, a menos de metro y medio y más de 15 minutos, y a esos contactos son a los que se les hace la PCR, la prueba diagnóstica. Si es solamente uno, se recurre solamente a los contactos estrechos; si es más de uno, entonces sí se confina el grupo. Si los de su alrededor tienen ventilación en la clase, no han tenido la mascarilla quitada y están a una distancia de más de metro y medio no tienen por qué contraer el virus. A lo mejor los confinan, pero no va más allá.

Don Federico, si se cerrara el centro, ¿qué tipo de educación se impartiría? 

Si se cerrará el instituto, tendríamos una educación online, 100%, como en marzo. Si se cerrará el instituto, nos iríamos todos a casa y sería desde casa desde donde trabajaríamos todo el mundo, vía online.

Doña Lola, ¿cómo cree usted que acabaremos este curso? 

Si os referís a si va a haber confinamiento, yo no lo puedo saber con seguridad, pero yo creo que, confinamiento como el curso pasado, no porque se está demostrando que en los centros educativos es donde menos contagios hay, son uno de los sitios donde más medidas se están tomando, las estáis respetando en la mayoría de los casos. La gente de vuestra edad se está contagiando más fuera del instituto que en el instituto. Entonces yo creo que, en primer lugar,  por eso no van a cerrar a no ser que haya un confinamiento general porque la epidemia empeore mucho y todo se cierre como el curso pasado, pero yo creo que no llegaríamos a eso y espero que no sea así. 

Si tuvieran el poder de afrontar la situación como ustedes quisiesen, ¿qué medidas tomarían? 

Doña Lola: Pues, mirad, una medida que podría mejorar esto, pero que es muy difícil de aplicar, sería poner clases por la mañana y por la tarde. Si los grupos de alumnos mayores de 16 años pudieran venir por la tarde todos, se facilitarían mucho las cosas, pero, claro, eso implica que el alumnado que depende del transporte escolar no podría venir por la tarde y a parte del profesorado es posible que le viniera muy mal trabajar por la tarde y no por la mañana, pero yo creo que sería una buena medida. Otra sería, se está trabajando para ponerlos, poner filtros en las clases para que no tengamos que tener las ventanas tan abiertas durante el invierno, porque vamos a pasar mucho frío y, de esa forma, con ese sistema de ventilación y renovación del aire pues estaremos más calentitos, pero, claro, eso es muy caro. Parece que el Ayuntamiento nos va a ayudar a comprar algunos filtros y vamos a ver si con su ayuda, con dinero del instituto, con dinero del AMPA e incluso con la aportación de las familias que pudieran colaborar, podríamos comprar algunos filtros, crear aulas más grandes, más desdobles para que se mantenga la distancia entre pupitres...

Don Federico: Mejoraría la formación del profesorado de manera online porque hay herramientas de las cuales no hemos adquirido los conocimientos. Mejoraría el tema de la conexión a internet, que se va mucho. Y después mejoraría también el nivel de implicación del alumnado, aquí tenemos que poner todos de nuestra parte, tanto nosotros como vosotros tenemos que poner de nuestra parte porque yo también percibo que a mucho alumnado, al  estar en su casa, le cuesta más adquirir el ritmo de trabajo que estando aquí.

Don Federico, según su criterio, ¿por qué cree que es importante dar clases de forma presencial? 

Porque evidentemente la información se transmite mejor dando clase de manera presencial. No es lo mismo que el profesor se pueda levantar, expresar, que el alumno pueda participar, interactuar con otros compañeros, con sus profesores … a que esté en su casa delante de un ordenador, que es mucho más frío; además, no sabemos realmente cómo estamos en cada casa. Entonces yo creo que ahora mismo es mucho mejor la presencial, también creo que la educación online tiene mucho margen de mejora y que todavía no estamos preparados, nos estamos preparando. Pero evidentemente, a día de hoy, tal y como estamos nosotros preparados y formados, con la educación presencial tenemos una posibilidad de interactuar todos que facilita la adquisición de conocimientos. 

¿Sacarían algo positivo de esta situación? 

Doña Lola: Pues positivo… Mucha gente está arrimando el hombro ya que esto es un trabajo de todos, la verdad. Nosotros, el equipo directivo, y yo, como coordinadora COVID-19, nos hemos hecho cargo de la situación, pero entre todos estamos llevando este protocolo y todas las medidas y hay mucho profesorado que está ayudando de una forma desinteresada y también los alumnos lo estáis haciendo bastante bien, os estáis implicando mucho;  la capacidad de implicación que estoy viendo, en general, en todo el mundo es grande.

Don Federico: Mucho. Como cosas positivas, evidentemente, a nivel tecnológico estamos mejorando bastante, estamos aprendiendo mucho y nos está obligando a formarnos en muchos medios en los que hasta la fecha no estábamos puestos. También a nivel personal, yo creo que esto tiene que servir para sacar cosas positivas y cosas buenas, yo creo que todo lo que nos hace sentirnos mal y todo lo que nos hace pasar por malos momentos, nos hace al final crecer, porque nos obliga a cambiar nuestra forma de trabajo.

 


  Rubén Arroyo Urbano y Genoveva García Flores (2ºBB)

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