martes, 23 de enero de 2024

La Casa de Papel

LA CASA DE PAPEL es un drama policíaco español protagonizado por un grupo de ladrones inadaptados que intentan robar la Real Casa de la Moneda de España. Cuando una joven (Úrsula Corberó) pierde a su compañero tras un atraco fallido a un banco, es reclutada por un hombre conocido solo como El Profesor (Álvaro Morte) para unirse a un grupo de delincuentes inadaptados que no tienen nada que perder al
participar en un gran atraco.  

Ahora conocida por el nombre en clave de Tokio, se une al ladrón de joyas Berlín (Pedro Alonso), la falsificadora de cheques Nairobi (Alba Flores), un joven hacker conocido como Río (Miguel Herrán), el equipo de padre e hijo Moscú (Pace Tous) y Denver (Jaime Lorente), y los primos Oslo (Roberto García Ruiz) y Helsinki (Darko Peric), dos ex soldados serbios, para idear un sistema para apoderarse de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre con el fin de imprimir, y escapar, con más de 2.000 millones de euros.

Ahora, cinco meses después, el grupo lleva a cabo su tarea. Pero a pesar de las estrictas normas y los planes claramente estudiados de El Profesor, las cosas no van como se esperaba. A lo largo de todo ello, se revela parte de lo ocurrido durante los cinco meses de preparación. Mientras tanto, las historias personales de algunos de los miembros, los rehenes y las fuerzas del orden comienzan a entrelazarse y a complicarse.

Tiempo después, para el rescate de uno de sus compañeros que tienen retenido y al que están torturando, organizan un nuevo atraco al Banco de España. Para este se unen nuevos miembros al equipo. Este atraco pinta tener un trágico final, pues poco a poco, los personajes van muriendo, se complican las cosas con la policía y al Profesor se le presentan algunos imprevistos que no tenía en sus planes.

Mi opinión es que esta es una de las mejores series de suspense y acción españolas. Desde que la inicias es muy difícil parar hasta no terminar de verla, ya que las situaciones que presenta son fascinantes. A lo largo de la serie, te encariñas con los personajes y los entiendes y, a la hora de perder a uno de ellos, lo sufres, y te alegras y emocionas al verlos lograr sus objetivos.



Lorena Escribano Ruiz (2º BA)

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