martes, 23 de marzo de 2021

ERMITA DE LA VIRGEN DE LUNA

En este reportaje vamos a conocer más uno de los bienes inmuebles más importantes de Pozoblanco, la Ermita de la Virgen de Luna, también conocida como el Santuario de la Jara. Es un santuario fundado en honor a la Virgen de Luna, patrona de las localidades de Villanueva de Córdoba y Pozoblanco. Es un edificio religioso que se encuentra en el centro de la Dehesa de la Jara, en el quinto de Navarredonda, a unos 10 kilómetros de Villanueva de Córdoba y 15 kilómetros de Pozoblanco.




Origen de la Ermita

La historia de la ermita se remonta al siglo XVI. Según cuenta la tradición popular, la ermita fue construida por la actuación de tres pueblos, Pozoblanco, Villanueva de Córdoba y Pedroche. Esto se debe a que un pastor de Pedroche se encontró a la Virgen en una encina cerca de las inmediaciones donde actualmente se encuentra el santuario. Para hacer honor y honrar a la imagen de la Virgen, se levantó la ermita en su honor entre el término municipal de Villanueva de Córdoba y Pozoblanco. Aunque no hay constancia de la antigüedad exacta del edificio inicial, sí consta que a finales del siglo XVI el obispado autorizó diversas reformas y actuaciones sobre el edificio y sobre todo su entorno.

A principios del siglo XVII, se decidió derribar el primitivo edificio, ya que era muy pequeño y se encontraba en una condiciones lamentables, y se decidió levantar un nuevo edificio para sustituir al anterior. Las obras de reedificación fueron realizadas por el mayordomo Juan Moreno de Pedrajas y se llevaron a cabo entre 1611 y 1612 de la mano de maestros como Francisco López Portillo y Juan Martín de Bargas. A finales de 1624, el cabildo de Córdoba concedió autorización para hacer, junto a la ermita, la casa que la cofradía de Pozoblanco, que utilizaría durante sus cultos, y también el humilladero enclavado delante del santuario, aunque la cruz se levantó finalmente en 1642.

En la actualidad, se sigue conservando dicho edifico aunque con el paso de los años ha tenido algunas reformas en la zona del ábside y del camarín de la Virgen.

 


Descripción del edificio


El edificio se encuentra ubicado entre encinas y cipreses que hacen que se produzca un enriquecimiento del entorno del paisaje.

En cuanto a su estructura, tiene planta cuadrada con tres naves separadas, dos laterales y una central, con columnas de granito que sujetan capiteles toscanos, sobre los que se sustentan arcos de medio punto que soportan la cubierta de madera. Dicha cubierta tiene una armadura de troncos de pino con nudillos cuadrados. La cabecera es semicircular interiormente y plana al exterior, y la sacristía contigua tiene planta rectangular.

Cabe destacar que el presbiterio es de planta cuadrada y se cubre con una cúpula sobre pechinas con linterna. En su interior desataca la imagen de la Virgen de Luna, titular del santuario.

Con respecto al exterior, hay dos puertas que permiten acceder a la ermita, una en la nave derecha y otra a los pies, que constituye la portada principal. Ambas puertas son adinteladas y construidas en granito.

La obra se completa con una espadaña de un solo cuerpo en ladrillo. El templo se halla precedido por un pórtico de arcos de medio punto sobre fustes graníticos monocilíndricos.

Con respecto a la imágenes religiosas de su interior, destaca la imagen de la Virgen de Luna, titular del Santuario, que se halla en el presbiterio, como antes hemos mencionado y, a la izquierda de la imagen de la Virgen, encontramos la imagen de un cristo crucificado conocido como el 'Cristo de la Mirada'. En la nave izquierda sobresale un retablo moderno de estilo clásico en el que se encuentra la imagen de San Diego, mientras que en el lado derecho, se hay un retablo donde se encuentran las imágenes del Sagrado Corazón de Jesús, de Santa Lucía y de San José.




Imagen de la Virgen de Luna


A lo largo de la historia de la imagen de la Virgen, cabe destacar que han existido tres imágenes. La primera imagen fue destruida en la guerra Civil, la imagen de la actualidad y una virgen de menor tamaño que permanece siempre en el santuario.

De la imagen antigua no se conoce ningún dato de su origen. Los datos que existen acerca de la talla hablan de que la talla de la Virgen fue destruida el día 25 de julio de 1936, en la Guerra Civil, cuando se encontraba en Villanueva de Córdoba. Varias fuentes afirman que la imagen correspondía a una `Virgen Gótica' y estaba tallada en madera cedro, ya que aún se conserva una parte de la mano izquierda.

Una vez concluida la guerra civil, se repone la antigua imagen. Para ello se trajo una imagen de la Virgen de la parroquia cordobesa de San Nicolás, ya que poseía un gran parecido con la anterior imagen, y finalmente esta imagen se llevó a Madrid. En 1948 se encargó la construcción de una nueva imagen, que fue elaborada por el escultor valenciano D. Francisco de Pablo. En la actualidad, es la imagen que veneran los dos pueblos.

En cuanto a la imagen que siempre permanece en la ermita, es una talla de madera de unos treinta centímetros de altura. Su antigüedad es del siglo XVIII. La imagen siempre permanece en la ermita y es venerada por los dos pueblos. Cabe destacar que desapareció durante la guerra civil, pero luego fue encontrada.


Romerías y fiestas dedicadas a la Virgen de Luna


En ambos pueblos, realizan varias romerías de llevada y de traída en honor a la sagrada imagen, pero cada pueblo las realiza de forma diferente.

En este epígrafe vamos a conocer qué actos se realizan cada año en honor de la sagrada imagen.

POZOBLANCO

Pozoblanco realiza dos romerías, la de traída, que se celebra diez días antes del miércoles de ceniza, y la de llevada, que se realiza el domingo de Pentecostés, tras haber permanecido la imagen en el pueblo durante 105 días.

Romería de Traída

Es uno de los acontecimientos más importantes que se viven en Pozoblanco. En la víspera del domingo de la romería se realizan una serie de actos. Entre ellos cabe destacar la presentación de la cartelería que anuncia los actos previos a la llegada de la Virgen; también es de tradición especial la salida del tambor por la calles del pueblo que anuncia la llegada de la Virgen y que hace referencia al hermano tamborilero que guía a los hermanos de la Virgen de Luna.

El sábado previo a la romería, a mediodía se transporta tradicionalmente la comida que los hermanos comerán al día siguiente en la romería, la comida se transporta en el conocido como el 'Carro de la Comida'. Por la noche, se lleva a cabo el pregón anunciando la fiesta principal. Este acto es llevado a cabo por un pregonero que es designado por la propia cofradía.

El día de la fiesta, se lleva a cabo la traída de la Virgen desde el Santuario al pueblo. En este día se hacen una serie de actos. En primer lugar, se convoca a los hermanos que realizan una procesión con la imagen de la Virgen alrededor del santuario y, posteriormente, una misa en la que se recibe a los nuevos hermanos que se incorporan a la cofradía. Tras este acto, en las inmediaciones de la jara se lleva a cabo la tradicional romería que reúne a familias que disfrutan de este día. Al llegar las tres de la tarde, la Virgen, acompañada de los hermanos y de los fieles que hacen con ella el camino, parte hacia el pueblo. En torno a las seis y media de la tarde, la Virgen llega al pueblo y es recibida por todo los fieles y, además, el sacerdote de Santa Catalina le impone las llaves de los Sagrarios de Pozoblanco y Villanueva; tras esto, se realiza una procesión por las calles del pueblo hasta llegar al Ayuntamiento, donde el alcalde le impone el bastón de Alcaldesa Perpetua de Pozoblanco. Finalmente, la Virgen llega a la Parroquia de Santa Catalina, donde todo el pueblo la aclama.

El lunes siguiente a la romería está declarado como fiesta local desde el 6 de febrero de 1961. Este día es uno de los más importantes del año en Pozoblanco y es conocido como el 'Lunes de Luna'.

En este día tan especial, se lleva a cabo una misa que corresponde con el primer de novena, que se realiza durante nueve días hasta el Martes de Carnaval. Tras finalizar la misa, hay una procesión de la Virgen por la calles del pueblo. Dichas calles se decoran para recibir a la imagen de la Virgen.

 



Romería de Llevada

Tras permanecer durante mas de cien días en Pozoblanco, la Virgen parte de Pozoblanco de vuelta a su santuario el domingo de Pentecostés. Para despedir a la sagrada imagen, se llevan a cabo una serie de actos.

Desde el martes previo al domingo de Pentecostés hasta el viernes, la Virgen visita las diferentes parroquias de la localidad y en ella cada día las asociaciones y cofradías pertenecientes a dicha parroquia llevan a cabo ofrendas florales, eucaristías... Durante su traslado, es acompañada por cada una de las bandas o agrupaciones musicales de nuestra localidad. El sábado se realiza una misa de despedida en honor a la Virgen de Luna.

El domingo de Pentecostés, la imagen de la Virgen sale de Santa Catalina en torno a la seis y cuarto de la mañana. Se hace una procesión por las calles del pueblo que tiene varias paradas en las descargas de los hermanos y en el Ayuntamiento, donde el alcalde le retira el bastón de Alcaldesa Perpetua. Tras la procesión, en el Arroyo Hondo, lugar donde se recibe a la Virgen, se produce su despedida. En este acto el sacerdote de Santa Catalina le retira las llaves de los agrarios de Pozoblanco y Villanueva, además se interpreta la salve y se despide a la Virgen.

Tras la despedida en el pueblo, llega al Santuario donde se realiza una misa de despedida.




VILLANUEVA DE CÓRDOBA

Villanueva de Córdoba, al igual que Pozoblanco, también realizan dos romerías, la de llevada y la traída. La de traída tiene el lugar el Lunes de Pentecostés, mientras que la de Llevada de vuelta al santuario se lleva a cabo el segundo domingo de octubre.

Romería de Traída

Los actos que se llevan a cabo para recibir la imagen de la Virgen son similares a los que se realizan en Pozoblanco. Una de las principales diferencias entre las dos cofradías es la ausencia de armas en la cofradía de Villanueva.

El domingo de Pentecostés, los jarotes realizan actos en el Santuario para celebrar la venida de la Virgen y como víspera al día grande. Al día siguiente, Lunes de Pentecostés, se realiza una romería en honor a la Virgen, además se hace una procesión alrededor del santuario y una misa en su honor. Tras celebrar dicha romería, en torno a las tres de la tarde parte hacia Villanueva, haciendo una parada importante en la Olivarera de Villanueva de Córdoba, donde los hermanos y fieles descansan y preparan a la Virgen para su llegada al pueblo.

Al llegar al pueblo, la Virgen es recibida por el pueblo y, especialmente, por la imagen de San Miguel, patrón de Villanueva. Allí el sacerdote de la Parroquia de San Miguel le impone la medalla de Alcaldesa Perpetua. Tras esto, se realiza una procesión que finalizará con la función de fuegos artificiales y la entrada de la Virgen en la Parroquia de San Miguel.

Durante nueve días se realiza una novena en honor a la imagen, y el domingo siguiente a la llegada de la Virgen, se hace una procesión por las calles del pueblo. Dichas calles están decoradas para recibir de forma especial a la Virgen que estará en el pueblo hasta el segundo domingo de octubre.



Romería de Llevada 

Tras permanecer durante varios meses en Villanueva, se le realiza una novena a la Virgen los días previos a su salida hacia el Santuario. Al mismo tiempo en el que se celebra la novena, se traslada y se despide en todas las iglesias del pueblo. El sábado de la víspera a su despedida se realiza por la noche una procesión de despedida por la calles del pueblo.

El domingo la Virgen sale en torno a las ocho de la mañana de la Parroquia de San Miguel para partir hacia el Santuario. Algunos de los momentos destacados de la procesión son la despedida de San Miguel a la Virgen, la retirada del bastón de Alcaldesa Perpetua y de las llaves de los sagrarios de Pozoblanco y Villanueva, así como una ofrenda de flores.

Tras ser despedida, realiza el camino hasta la Jara y, al llegar allí se realiza una misa en su honor y es despedida por los fieles y hermanos de Villanueva de Córdoba.



Tras la llevada de la Virgen al Santuario de nuevo, la Virgen permanece cuatro meses hasta que en febrero sea trasladada a Pozoblanco. Esta tradición se realiza a todos los años.

A lo largo del reportaje, hemos conocido más sobre unos de los monumentos que forman parte del patrimonio inmaterial de Pozoblanco y hemos podido conocer su origen, la historia de la imagen y los actos que tienen lugar en torno al santuario.

Rubén Arroyo Urbano (2º BB)

No hay comentarios:

Publicar un comentario