Hoy le hemos robado un poco de su tiempo a don Bartolomé, profesor de Tecnología, para que nos cuente más sobre la nueva metodología que aplica en el aula y cómo la ha adaptado a la situación atípica que estamos viviendo en este nuevo curso. Para saber más sobre este nuevo método, le hemos hecho algunas preguntas.
¿Cómo se le ocurrió la metodología que emplea en su asignatura?
La metodología no me la he inventado yo, es una metodología innovadora, muy actual y nueva, que se está implantando en muchos centros educativos por los profesores que así lo desean porque es muy efectiva. Yo la conocí cuando fui a un curso de formación del profesorado y escucho que existe este tipo de metodología, entonces investigo en Internet, en algún curso sobre este tipo de sistema, llamado ABP "Aprendizaje Basado en Proyectos"´.
¿De qué manera enfocará su asignatura partir de ahora?
Las dos preguntas están relacionadas. Se me ocurre porque yo entiendo la necesidad de cambiar la metodología en mi aula. Han evolucionado muchas cosas: las máquinas, las noticias, la bolsa; han evolucionado muchas cosas en nuestra sociedad y con ello las personas, y como evolucionan las personas, pues también cambia su forma de aprender, y yo entiendo que debo cambiar mi forma de enseñar para que se produzca el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Si mis alumnos no aprenden, yo no enseño, por lo cual yo no he realizado mi trabajo. No puedo hacer milagros, no soy san Bartolomé, soy don Bartolomé (dice entre risas). Pero yo entendía que debía dar un pasito más y cambiar la metodología hacia una nueva forma más activa y más actualizada conforme a las necesidades del alumnado; vosotros, como alumnos, habéis cambiado, y yo, por lo tanto, tengo que cambiar mi forma de enseñar.
¿Qué proyectos y actividades llevará a cabo?
El aprendizaje basado en proyectos es una metodología activa, donde el alumnado se convierte en el sujeto de su propio aprendizaje, es decir, ya no van a depender tanto del profesor, sino de ellos mismos, con lo cual el alumno debe estar activo durante toda la hora que esté conmigo en clase; no vale ya el viejo modo "ahorro de energía", en el que el alumno suprime varias de sus funciones, dejando solo la de respirar, la de parpadear y la de decir que sí de vez en cuando (dice entre risas). Aquí, como te mantengas en ese "ahorro", no aprendes, tienes que ser tú la persona activa, no el profesor.
A partir de esa premisa, se acaban las clases magistrales en las que el profesor se pone en la pizarra y lo pone todo, y el alumno lo único que tiene que hacer es recoger la información que se le traslada: eso se ha acabado.
Aquí lo que se plantea es una pregunta clave, la resolución de un problema o la elaboración de un producto y en base a eso el alumno debe ir aprendiendo por sí mismo con las herramientas que necesite, que se proporcionan en el aula, llámese Internet, robots, etc. Debe darle solución a ese problema o crear el producto que se le ha pedido o dar respuesta a una pregunta guía. De esta manera, el profesor deja de ser el que tiene toda la información en la cabeza y se convierte en un facilitador de la tarea de aprendizaje del alumnado. Yo lo que hago es facilitarles a mis alumnos que puedan aprender, proporcionándoles robots, materiales, ordenadores, conexiones a Internet, conocimientos...
No quiere decir que el profesor ya no enseñe, yo enseño la teoría, los aspectos básicos y luego ya es el alumno el que va dando pasitos para construir su propio aprendizaje. Con esto sucede que no es lo mismo que yo lo cuente a que tú lo hagas. De este modo, el alumnado ya no le cuenta al profesor lo que tiene que aprender, sino que él mismo lo aprehende, y esto es lo que se queda. Esto hace que las clases sean más dinámicas, más divertidas y las horas se pasen de momento. Cuando toca el timbre, el alumno dice: "Ya se ha acabado la hora?", es decir, que se lo pasan bien ya que la metodología es muy dinámica, muy activa y aquí el aburrimiento no existe. En Tecnología se aprende divirtiéndose y nos divertimos aprendiendo. Eso es lo más importante y este sistema nos facilita que podamos hacer eso; otros, no.
¿Qué han opinado los alumnos de esta decisión?¿Y los profesores?
Bueno, pues el profesorado está expectante porque tampoco lo lleva a cabo. Quizás sea el primero, no solo en el instituto, sino también en nuestra comarca. Yo soy crítico en este sentido, los profesores tenemos que movernos y evolucionar, y no anquilosarnos y quedarnos quietecitos, mientras que los jóvenes van cambiando su pensamiento y su forma de aprender. Los profesores no podemos seguir enseñando como hace 30 años. Yo sé que esta iniciativa puede hacer que algunos profesores me tachen de loco, pero, como yo ya estoy acostumbrando a ser un loco en la educación desde hace muchos años, es una cosa que me importa un rábano ya (dice entre risas).
A veces la educación necesita de personas un poco atrevidas que den un paso hacia adelante y que les digan a los demás: "Hay otra forma de enseñar".
En cuanto a los alumnos, todo les parece genial. Esto ha pegado un cambio bestial en mi clase, y ya digo que estoy empezando. Cuando lo instalé seriamente fue en curso anterior al confinamiento, y no pude terminar de llevarlo a cabo. Este año, debido a que este método necesita un aprendizaje basado en el trabajo en grupo, con contacto, y ya sabéis cómo están las cosas, no puede haber contacto.
¿Cree que algún día será la metodología utilizada por el sistema educativo?
Cuando yo me enteré de esto en Córdoba, ya se hablaba sobre ello y hará por lo menos unos 6 años en un curso que hice sobre convivencia escolar, que impartí yo mismo, hablé con otro compañero, que fue a impartir un curso de co-educación. Allí, hablándolo varios ponentes con los responsables de los cursos, ya se nos decía que tarde o temprano al profesorado se le va a obligar a reciclarse en cuanto a estrategias pedagógicas y se sabe que esta va a ser una de ellas, ya que esta siendo la más eficaz.
Hay otras estrategias que son la Gamificación del aula y esto consiste en jugar un poco en el aula para aprender y luego hay otra que es la Flipped Classroom o clase al revés, que consiste en el que el alumno aprende en casa y hace los trabajos en clase. Tradicionalmente, se imparte la clase magistral en las aulas y se mandan tareas para casa, pues aquí no se hace así, sino que se le manda al alumno que investigue y que llegue a adquirir conocimientos en su casa y aquí luego en clase se ponen esos conocimientos en práctica haciendo tareas o algún tipo de proyecto. La mía ya digo que va enfocada al ABP porque este sistema incluye todos los estándares que la normativa educativa nos hace aplicar.
¿Y cuáles son estos estándares? Pues la colaboración (esto es un trabajo colaborativo; por eso digo que este año, con el tema del contacto, no podemos colaborar tanto); tiene que haber una comunicación (se trabaja en grupo y los alumnos tienen que nombrar a un portavoz, un secretario, el tesorero, el responsable de material, etc. Tienen que ponerse de acuerdo ellos, debe haber un pensamiento crítico -de hecho, uno de los papeles que he incluido en el grupo es el criticador, cuya función es criticar lo que se hace, pero en un buen sentido, para que poniendo en duda todo lo que se hace, nos aseguremos de si ese paso está bien dado o no está bien. En este caso, tener a una persona que te critique te va a ayudar porque busca siempre lo negativo y entonces nos hace mejorar-. Aquí no vale el "yo te doy libertad, pero vas a hacer lo que yo te diga". Tú tienes siempre una conclusión, un aspecto crítico sobre lo que estás haciendo, si es útil o si no, hacia dónde va... ); un aprendizaje cooperativo, no solo colaborar, sino cooperar, que son dos cosas parecidas pero distintas, pues cuando se colabora unos ceden y otros dejan, pero en el trabajo cooperativo vamos todos a una y con ganas.
Hacemos uso de las nuevas tecnologías como no puede ser de otra manera y más en la asignatura de Tecnología, y en todas las asignaturas en las que se lleva esto a cabo porque, para investigar, necesitamos acceso a Internet. El conocimiento hoy en día no está todo en la cabeza del profesor, puede estar en un smartphone conectándote a Internet. Lo que hace falta es saber usar ese conocimiento. Se proporciona una autonomía en el aprendizaje, de manera que el alumno es el sujeto activo de su propio aprendizaje, él solo va creciendo mientras aprende autónomamente ¿Qué sucede cuando una persona se da cuenta de que puede aprender sola? Que crece su autonomía y esta cada vez se va sintiendo más capaz y esto es una bola que va creciendo: como cada vez aprendo más, me siento más capaz y aprendo más y entonces consigo ser una persona capacitada. Aquí no se persigue solo el objeto final que hayamos creado, el éxito no reside en el producto final, sino en el proceso de aprendizaje, en el camino. Ahí es donde está el meollo de esto. Yo no valoro tanto que me entregues al final un examen, si por el camino no has aprendido nada.
Además de lo ya comentado por usted, la situación en la que nos encontramos, ¿ha afectado de alguna manera a esta nueva metodología?
Como he contado antes, claro que afecta ya que es un trabajo en el que es importante trabajar en grupo. En consecuencia, eso se ha eliminado y me tengo que buscan unos nuevos métodos para hacer las cosas y trasladar esta metodología un poco a un trabajo individual, aunque la base del ABP está en el trabajo en grupo donde haya colaboración, cooperación y comunicación. Ahora mismo están en las mesas sentados y ahí hay comunicación, hago algunas actividades en las mesas con las mascarillas, pero trabajar en grupo con contacto este año no puede ser, por eso debe ser más liviano y diferente.
Estoy buscando nuevos métodos para el trabajo individual y al mismo tiempo cooperativo; por ejemplo, con la herramienta digital, pues los alumnos, cada uno en su mesa, usan los ordenadores y van compartiendo enlaces e información y pueden hablar entre ellos. Sin embargo, este año no pueden hacer un objeto o un proyecto con Arduino o de robótica, no pueden tocar los robots, ni programarlos. Pero bueno, también nos sirve para aprender otra forma de llegar al mismo sitio y que los alumnos sigan aprendiendo. Y la tarea del docente es la de facilitador del aprendizaje, más que como el que más sabe de la clase, y el profesor está mucho más feliz de ver al alumno aprender y divertirse.
Adelfa Moreno Redondo y Moisés García Cabanillas (2º BB)